martes, 26 de junio de 2012


EL ADOLESCENTE

La vida escolar estuvo durante mucho tiempo relacionada con factores determinantes del desarrollo. La formación en los espacios del hogar comprendía desde el nacimiento hasta los siete (7) años cumplidos; la educación primaria de cinco años, desde los siete años cumplidos hasta los doce años cuando terminaba el grado quinto y la educación media, desde los doce años cumplidos hasta los diez y ocho años; edad para entrar a prestar el servicio militar obligatorio durante 18 meses, etapa que limitaba con la mayoría de edad a los 21 años.

Adolescencia, etapa de maduración entre la niñez y la condición de adulto. El término denota el periodo desde el inicio de la pubertad hasta la madurez y suele empezar en torno a la edad de catorce años en los varones y de doce años en las mujeres. Aunque esta etapa de transición varía entre las diferentes culturas, en general se define como el periodo de tiempo que los individuos necesitan para considerarse autónomos e independientes socialmente.

El comienzo de la pubertad está asociado con cambios drásticos en la estatura y en los rasgos físicos. En este momento, la actividad de la hipófisis supone un incremento en la secreción de determinadas hormonas con un efecto fisiológico general. La hormona del crecimiento produce una aceleración del crecimiento que lleva al cuerpo hasta casi su altura y peso adulto en unos dos años. Este rápido crecimiento se produce antes en las mujeres que en los varones, indicando también que las primeras maduran sexualmente antes que los segundos.

La madurez sexual en las mujeres viene marcada por el comienzo de la menstruación(menarquía) y en los varones por la producción de semen. Las principales hormonas que dirigen estos cambios son los andrógenos masculinos y los estrógenos femeninos. Estas sustancias están también asociadas con la aparición de las características sexuales secundarias.

En los varones aparece el vello facial, corporal y púbico, y la voz se hace más profunda. En las mujeres aparece el vello corporal y púbico, los senos aumentan y las caderas se ensanchan. Estos cambios físicos pueden estar relacionados con las modificaciones psicológicas; de hecho, algunos estudios sugieren que los individuos que maduran antes están mejor adaptados que sus contemporáneos que maduran más tarde.

Durante la adolescencia no se producen cambios radicales en las funciones intelectuales, sino que la capacidad para entender problemas complejos se desarrolla gradualmente.

El psicólogo francés Jean Piaget determinó que la adolescencia es el inicio de la etapa del pensamiento de las operaciones formales, que puede definirse como el pensamiento que implica una lógica deductiva. Piaget asumió que esta etapa ocurría en todos los individuos sin tener en cuenta las experiencias educacionales o ambientales de cada uno.

Sin embargo, los datos de las investigaciones posteriores no apoyan esta hipótesis y muestran que la capacidad de los adolescentes para resolver problemas complejos está en función del aprendizaje acumulado y de la educación recibida.

Los cambios físicos que ocurren en la pubertad son los responsables de la aparición del instinto sexual. En esta etapa su satisfacción es complicada, debido tanto a los numerosos tabúes sociales, como a la ausencia de los conocimientos adecuados acerca de la sexualidad. Sin embargo, a partir de la década de 1960, la actividad sexual entre los adolescentes se ha incrementado.

Por otro lado, algunos adolescentes no están interesados o no tienen información acerca de los métodos de control de natalidad o los síntomas de las enfermedades de transmisión sexual. Como consecuencia de esto, el número de muchachas que tienen hijos a esta edad y la incidencia de las enfermedades venéreas están aumentando.

El psicólogo estadounidense G. Stanley Hall afirmó que la adolescencia es un periodo de estrés emocional producido por los cambios psicológicos importantes y rápidos que se producen en la pubertad. Sin embargo, los estudios de la antropóloga estadounidense Margaret Mead mostraron que el estrés emocional es evitable, aunque está determinado por motivos culturales. Sus conclusiones se basan en la variación existente en distintas culturas respecto a las dificultades en la etapa de transición desde la niñez hasta la condición de adulto. El psicólogo estadounidense de origen alemán Erik Erikson entiende el desarrollo como un proceso psicosocial que continúa a lo largo de toda la vida.

El objetivo psicosocial del adolescente es la evolución desde una persona dependiente hasta otra independiente, cuya identidad le permita relacionarse con otros de un modo autónomo. La aparición de problemas emocionales es muy frecuente entre los adolescentes

La mayor parte de los padres de adolescentes que acuden en solicitud de ayuda psicológica hacen la siguiente pregunta: ¿Qué hago con mi hijo, que está insoportable?

La adolescencia es una etapa de la vida que marca el fin de la infancia y el comienzo de la edad adulta. Conserva remanentes de  la primera etapa de la vida y  su desarrollo y sus manifestaciones son consecuentes de la forma como esta se haya vivido. El primer paso consiste en conocer a su hijo adolescente desde lo biológico, lo fisiológico y lo comportamental:

El comienzo de la adolescencia depende en lo fisiológico, del comportamiento del sistema hormonal determinado por la maduración de la glándula hipófisis o pituitaria que orienta dos aspectos fundamentales: el crecimiento y la genitalidad. Desde este momento se empiezan a dar manifestaciones notables en el crecimiento: aumento de la estatura, alargamiento de piernas y brazos, sudoración y mal olor en axilas y pies y cambio en los procesos digestivos.

Conservación de la voz de niño en la mujer. Cambio de voz en el hombre con los consecuentes “gallitos”. Maduración de las glándulas mamarias en la mujer y aparición de los senos. Atrofia de las glándulas mamarias en el hombre y aparición de la molesta “piedrilla”. Menarquia o primera menstruación en la mujer y cambio en el tamaño de las caderas. Erecciones espontáneas y poluciones nocturnas en el hombre. Vellosidades en axilas y genitales en la mujer y en forma incipiente en brazos y piernas. Aparición de vellosidades en el cuerpo: cara, axilas, brazos, piernas, brazos y genitales en el hombre.

Los cambios fisiológicos y biológicos determinan cambios en el comportamiento. Para orientar al lector, se ha elaborado un abecé del adolescente:

AFICIONES. Ver televisión todo el día. Lo novedoso.
AMISTAD: la primera amistad permanente es del mismo sexo y desde allí se proyecta a otro tipo de personas.
AMOR. Etapa del primer amor.
APATÍA. Misántropos.
APETITO. A veces comen mucho, a veces comen poco, a veces no comen. Son clientes asiduos de la comida chatarra.
ATEMPORALIDAD. El tiempo no rinde. Carecen de noción sobre el tiempo que se hace corto en la diversión y largo en las tareas y obligaciones que difícilmente asume.

COMODIDAD. Dinero y bienes. Poco amor al trabajo y a las responsabilidades. Aprecio de las comodidades brindada por otros: padres y familia.

DESOBEDIENCIA. La autoridad se diluye. La lucha consigo mismo es permanente no tiene a quien obedecer. La obediencia está supeditada al interés de lo inmediato. Se cuestiona la autoridad del hogar, del Profesor,  de la Dirección del plantel, de la ciudad, del país, del mundo. Todo lo que implique autoridad es cuestionable, la desobediencia es lo común.
DESORDEN. La casa se convierte en un reguero de cosas, desde el momento de entrar a ella, igual ocurre con sus útiles de colegio, su cama y su ropero.
DROGAS: Exploración en este terreno empezando por las drogas sociales como el cigarrillo y el alcohol. En engancharse en este terreno depende de múltiples factores.

EXPLORACIÓN. Búsqueda de identidad en lo social y lo sexual. Se buscan definiciones. Se explora en el mundo del sexo, el juego y la droga: se inicia con cigarrillo y alcohol.

FAMILIA. El concepto de familia no es muy firme.

INTERES. Dualidad entre niño y adolescente. De acuerdo con el interés, se es niño o se es adulto, dependiendo de lo que convenga en el momento.
IRA. Cambio de genio. Las pataletas de la infancia. No saben en qué espacios ubicarse.
IRRESPETO. La lucha generacional. Hay una búsqueda de espacios en los espacios de los adultos. Los enfrentamientos con la autoridad implican enfrentamientos con los mayores, con sus órdenes y sus opiniones.

MIEDO. Inseguridad y miedo. Enfrentarse a responsabilidades de adulto y tomar decisiones con seguridad. Búsqueda permanente del lecho materno.
MENTIRA. Dificultad para entender la nueva etapa sin superar la anterior. Algo aparece distorsionado en la mente del individuo. Aparece la mentira como un lenguaje alternativo y como mecanismo de defensa.

OPINIONES. Reafirma su seguridad y trata de establecer e imponer sus puntos de vista. No quiere ser perdedor y menos en temas que afecten su amor propio. Busca siempre reconocimiento.

PADRES. Las relaciones con los padres se hacen difíciles. El padre no pasa de ser un tonto que provee y la madre una vieja alegona. Son más firmes las relaciones con la madre a quien buscan para dormir en el rincón en los momentos de miedo. (¡Ojo!).
PEREZA. Se sienten aperezados. Quedarse todo el día sin bañarse. Se bañan a las seis de la tarde para acostarse.
POLÍTICA. La búsqueda del cambio.

RIESGO. Les gusta el riesgo y aquellas cosas en las que está presente la adrenalina.

SEXUALIDAD. La búsqueda de la sexualidad es inmanente empezando en el reconocimiento de su cuerpo.
SUEÑO. Duermen mucho.
-NLA-

LA INSTITUCIÓN ESCOLAR COMO SISTEMA SOCIAL



Un sistema social comprende “una pluralidad de actores individuales que interactúan con un sistema de símbolos culturalmente estructurados y compartidos”, en un medio ambiente específico.

El intercambio profundiza la acción del sistema sobre el medio y puede limitar la dependencia del uno con respecto al otro. El sistema social se relaciona con todos los componentes de la totalidad de sistemas y el subsistema de la institución escolar con su rol administrativo.

En la escuela se da una pluralidad de actores individuales que interactúan con dos clases de fenómenos independientes e interactuantes: las instituciones y los individuos. En mayor o menor escala estos individuos poseen una fácil adaptación social, hábitos de trabajo y un condicionamiento progresivo para relacionarse unos con otros. Las relaciones sociales juegan un papel determinante en el proceso social, es esta una situación que la escuela se ubica como sistema social estructurado y preparado para efectuar los requerimientos de los diferentes procesos y los cambios que van a condicionarlo.

La Institución Escolar como sistema social, no se da en forma gratuita. No parte el concepto de la necesidad de aprender, de normalizarse, de adquirir unos roles “para suplantar una sociedad o una generación que ya cumplió los suyos”.

Estos componentes habilitan la acción del sistema sobre la sociedad pero no la determinan. Las necesidades son fuertes para que la acción educativa ofrezca (producto) resultados que van a incorporarse a los procesos sociales. Es así como podemos ubicar la educación, la institución escolar, la clase escolar como integrantes del sistema social general o como un sistema social en particular.

Cada individuo marca su individualidad en el proceso pero no obedece a regulaciones propias. Sus roles específicos realmente son únicos pero obedecen a la norma preestablecida y a la dimensión personal, originadas en el proceso social amplio.

Muchos pretenden aislar el desempeño de los roles, pero la socialización del elemento actuante dentro de la “pluralidad de actores” condicionan un rol por otro, lo estructuran y comparten y lo proyectan sobre el todo social.
-NLA-

¿LA SOBREPROTECCIÓN PUEDE SER NOCIVA?


La sobreprotección es la actitud que asumen las personas con el propósito de brindar excesivo cuidado a algo o alguien, sobre quien se tiene autoridad; y ante el temor de que pueda ser afectado por agentes externos. Este comportamiento es común de padres a hijos; partiendo del supuesto, que aquellos elementos de formación personal y social dados, no fueron lo suficientemente sólidos. La supuesta consideración de haber fallado, invita a asumir una vigilancia permanente, por demás estricta, para darle una adecuada salida a la culpa.

Desde la concepción se deben tener cuidados con la madre y con la criatura en gestación; el embarazo no es una enfermedad sino un proceso natural y el organismo responde a ese proceso en forma eficiente. Es posible que el cúmulo de miedos de la madre por infinidad de razones, afecte en forma notoria al niño(a). Su tranquilidad crece en la medida que el nacimiento es normal y decrece cuando se presentan complicaciones. Sin embargo, con fundamentos o sin ellos, cuando los padres consideran que los niños(as) son vulnerables en todo momento y todo sentido, sin importar la edad, los convierten en centro de atención y cuidado que regularmente llega a los excesos.  

Al iniciar la vida escolar comienza la tarea de los padres de llevar al niño(a) hasta la institución escolar. Permanecen un buen tiempo en su compañía,  para lo cual colaboran con las labores de la institución o se ubican en lugares estratégicos por fuera del plantel, para vigilarlo(a) a distancia.

Hay intervención en la selección de sus amigos con quienes poco permiten compartir si no tienen su visto bueno. La participación en ambientes de socialización en cuanto el uso del lenguaje se encuentra exigida por parte de los mayores quienes definen lo que el niño debe contestar: “diga”, “salude”, “conteste”; y la manera como debe actuar: “cante”, “baile”, “despídase”.

El niño sobreprotegido puede tener dificultades de adaptación en los procesos académicos. Tareas y trabajos regularmente requieren la intervención de los padres, quienes exigen al estudiante las mejores notas; procedimiento  que se realiza en algunos casos intercediendo ante profesores y rectores para lograr lo que esperan de los hijos.

La elección de carrera es una cosa que solo se define en el hogar. El estudiante debe escogerla de acuerdo con los deseos de los padres y “que no se le vaya ocurrir la música, la literatura, o la pintura”. Eso lo puede hacer en sus ratos libres o como entretenimiento. El nuevo profesional no necesita tener obligaciones económicas con su hogar, porque allí nada le falta. Cada cosa que proyecte o diga debe tener la  aprobación y el consentimiento de alguien del núcleo familiar; en igual forma, puede esperar tranquilamente que le consigan trabajo.

El “niño sobreprotegido” está obligado a responder “al esfuerzo de sus padres”, seguir las orientaciones hacia una vida ordenada, conseguirse una novia que debe pasar por el tamiz de la familia y casarse para que las malas lenguas no digan que es “gay”; además, tener dos hijos - la parejita-,  para que no se les vaya ocurrir rumorar que es estéril.

La residencia de la nueva pareja puede ser en los espacios ampliados de la vivienda familiar o cerca a la casa paterna, bajo la sombra de papá y mamá.

A la persona sobreprotegida se le dificulta enfrentarse a la vida, porque todo es un riesgo: la soledad, la tranquilidad, la seguridad.  No es posible salir de la casa, renunciar a las comodidades y asumir gastos.

El “Hotel Mama” no se puede abandonar. Todo opera en forma irregular porque no se ha construido autoconfianza, ni amor por sí mismo, no hay seguridad ni en el hablar ni en el actuar.

La sobreprotección se convierte en una barrera que obstaculiza el desarrollo armónico de la personalidad en un mundo de dependencia absoluta… casi sin remedio.
-NLA-

martes, 19 de junio de 2012


ADMINISTRAR

La administración es todo acto operativo que consiste en prever, organizar, dirigir, coordinar y controlar. Ubicada en el contexto de una organización que armonice con los planteamientos iniciales, tenemos: la teoría X nos muestra una forma autocrática, carente de deliberación, estancada, anacrónica, fuera del contexto social moderno. Persiste en la escuela tradicional, es individualista y aferrada a su propia concepción, es una escuela feudal, el núcleo clerical o la academia militar.

En un establecimiento de tipo X: El rector se desempeña de acuerdo con las expectativas de su rol. Establece escasa comunicación con el personal a su cargo. Dispone de un pequeño grupo de incondicionales con quienes distribuye las tareas de responsabilidad y las actividades que hay que desarrollar. Desconoce las necesidades - disposiciones del resto del personal en cuanto solo obra por sus caprichos y movido por sus propios intereses.

Las causas de su actuación radican en su escasa preparación, desconocimiento de las condiciones propias de su rol y la limitación presupuestal a que se ve abocada la institución. El trabajo es una imposición. Un desconocimiento tácito a la creatividad y al desempeño de una labor fructífera en otras condiciones.

El trabajo como inherente a la naturaleza humana. Planteamiento que se acerca en cierta forma a la teoría Y. El trabajo es el creador del hombre. Prospecta todo un proceso de evolución de las formas más simples a la complejidad de los instrumentos más sofisticados, creados en la medida de hacer del ocio creativo el fruto de su esfuerzo y la culminación de una u otra etapa de su desarrollo. Se cumpliría entonces el objetivo de dominar la naturaleza logrando vencer todo obstáculo para encontrar mejores condiciones de vida.

Podemos aducir que el trabajo es inherente a la naturaleza humana, propio de ella y manifiesta su existencia a través de las realizaciones materiales y culturales.

Lo que hace entonces que el trabajo sea considerado como castigo es todo aquello que condiciona la actividad laboral del hombre a la explotación, la alienación de sus perspectivas amplias, el desprecio de su condición, el desconocimiento de sus valores, la deshumanización que convierte esta actividad solamente en productora de bienes y servicios.

El establecimiento tipo Y, amplia todo un proceso. La actividad laboral implica interacción de intereses individuales y objetivos organizacionales. Plantea la posibilidad de humanizar la institución sin caer en la anarquía. Existe una institución: (Colegio JMO de Pereira). Un administrador que equilibra las expectativas de su rol con las disposiciones – necesidades. Se ha preocupado por indicar a cada miembro de la institución sobre las formas más apropiadas para el desempeño de su rol particular. Hay efectividad y eficiencia.
-NLA-

DEPENDER DE…

La dependencia indica una condición especial de subordinación; tiene su campo de acción en adicciones, compulsiones y  hábitos y  tiende a considerar como imprescindible a personas, lugares, cosas, alimentos y drogas. 

La adicción se mide desde la tendencia compulsiva hacia algo, limita la autonomía y en cuanto compulsión afecta la fuerza interior dominando el pensamiento y la voluntad.

El hábito orienta a repetir una conducta, pero una adicción o compulsión se convierte en un fijación muy fuerte que puede modificarse si se utiliza una estrategia adecuada.

Al satisfacer la ansiedad generada por la dependencia, se logra una recompensa inmediata cuando aparece esporádicamente la persona que se desea ser y se enfrenta la incomodidad social, más fácil de sobrellevar que la abstinencia. 

Las dependencias patológicas tienen su mejor referente en aquel miembro de la familia incapaz de despegarse de su influencia y cuidado. La familia es el nido del cual no es posible salir, se trata de ser siempre el niño indefenso – por mucha edad que se tenga -, necesitado de los cuidados de la madre y de todos los miembros del hogar; regularmente arma sus pataletas para obtener lo que quiere. Niño que se niega a crecer, a quien el desprendimiento no le conviene porque no conoce el riesgo. La dependencia ata simultáneamente a una madre absorbente y un padre proveedor.

Otro de los casos clásicos de dependencia patológica se encuentra en las relaciones de pareja. El problema surge al asumirse equivocados principios de propiedad y posesión, fortalecidos por discutibles preceptos culturales. Este comportamiento puede confluir en el clásico “morir de amor”.

Es importante darse cuenta que el ser humano solamente es propiedad de sí mismo, su cuerpo, sus pensamientos y deseos son personales y no pueden ser objeto de propiedad en ningún momento. La media naranja es una falacia, porque cada uno es un mundo que no puede estar partido en mitades, responde a unos espacios culturales y a pesar de estar comprometido de palabra conserva sus libertades eternas.

Por esta razón lo único que puede considerar propio, es el cuerpo, el alma, los pensamientos, las ideas y la oportunidad que regala el universo de disfrutar del milagro de la vida, la que se vive.

El amor, por su parte, nunca ha sido eterno, solamente se eterniza en la necesidad de afecto y en el reconocimiento de quien lo posee.

Para responder a las exigencias del entorno y facilitar el paso por el mundo, además de las personas, el ser humano debe acompañarse de cosas básicas: alimentos, bebidas, distracciones y el uso de la tecnología.

En el momento de las exploraciones, llegan el alcohol y las drogas, los cuales en compañía de grasas y azúcares, pueden pasar a ser reguladas o quedarse haciendo parte de las dependencias. En el caso de la tecnología, tanto el computador como el celular y sus derivados se convierten en elementos imprescindibles con episodios de dependencia enfermiza.

La tarea que nos compromete para enfrentar cada una de las situaciones descritas, debe estar orientada al reconocimiento del fenómeno para dirigir la intervención con los recursos disponibles en los espacios del hogar. 

Una cuidadosa observación, conlleva a trazar un plan de acción. Si la situación amerita ayuda psicológica para la readecuación de unos comportamientos, este debe tener como herramientas la autoobservación, el autotratamiento, el refuerzo de los comportamientos positivos y buscar mermar la importancia de los negativos.

En casos avanzados se puede pensar en la intervención de grupos terapéuticos: primero el hogar como grupo terapéutico base,  Alcohólicos Anónimos, Glotones Anónimos y grupos de rehabilitación controlada, además de la intervención  psiquiátrica con ayuda de medicamentos.
-NLA-

martes, 12 de junio de 2012


EL TRABAJO

 Trabajo es toda actividad humana encargada de producir efectos sobre la naturaleza. El hombre es el único animal con hábitos de trabajo orientados a la producción de bienes y servicios.

Existe un gran número de teorías sobre el tema: los textos bíblicos,  enfrentan el malentendido del paraíso (en una situación en la cual hay desigualdad de condiciones), con una obligación para los seres humanos: “ganar el pan con el sudor de la frente”: Desde este momento se habla del “trabajo como castigo”.

El problema se empieza a resolver desde una división de actividades entre dos hermanos rivales, uno dedicado a la agricultura y otro dedicado a la ganadería. Como se conoce, el problema de las ofrendas en este caso particular terminó en tragedia.

Posteriormente Federico Engels descartando las teorías de tipo religioso determina que el trabajo es una de las bases de la evolución humana y lo plantea en su obra “El papel del trabajo en la transformación del mono en hombre”, allí se define igualmente que desde el trabajo aparece el lenguaje. Nos ubicamos, entonces, entre dos interesantes posiciones: o es un castigo causado por la desobediencia o es el fruto de la necesidad humana de trascender.

Para que exista trabajo se requieren unos elementos básicos: una materia prima predispuesta para que sobre ella se realice un proceso de transformación y la actividad humana que es la encargada de obtener un producto final que tiende a satisfacer una necesidad.

Las relaciones entre instrumentos de trabajo, medios de trabajo y procesos de transformación que tienen como base el trabajo del ser humano, han generado todo tipo de estudios que han alimentado la microeconomía y la macroeconomía, desde la sola perspectiva de los conceptos de propiedad y de la denominada mercancía fuerza de trabajo.

Al considerar la actividad humana como castigo, se tiene en cuenta la acepción tradicional: el trabajo es una respuesta a la desobediencia del ser humano que al subestimar el ocio de su estado inicial pretende suplantar los roles de la divinidad, desconociendo la autoridad suprema, colocándose desafiante ante ella y recibiendo toda una carga de males que inciden en el trabajo y las enfermedades.

Este aspecto teológico de la actividad laboral y la consecuente división del trabajo, división de la sociedad en clases y división en roles morales (buenos y malos); son fuertes elementos  que pretenden mostrar las incongruencias del trabajo con el ser  humano: no es apto para el trabajo, ni corresponde a él en la medida que los mecanismos sociales no se impongan para hacerlo responder.

Surgen dos conceptos dignos de analizar: el trabajo como imposición el trabajo como una actividad liberadora.
-NLA-

TARJETA DE FELICITACIÓN

Cuando Javier Ramírez González tuvo la idea de fundar un periódico, “con una nueva opinión”, que sirviera de vocero a los intereses de la ciudad y la región, después de innumerables consultas y cavilaciones, concretó su propósito el primero de Febrero de 1982 con El Diario del Otún.

Desde ese preciso instante y con la acuciosidad de un padre proveedor, cimentó bases, marcó derroteros y buscó que acciones y logros se consolidaran en el tiempo, enviando un pedazo de alma sobre el devenir de las cosas creadas por su ingenio para dar testimonio futuro de su paso por el mundo.  Treinta años después se recuerda aquel momento inicial y se puede considerar desde el recorrido por la historia de la empresa, que el proyecto fue exitoso en la planeación de sus resultados. El Diario del Otún llegó a la mayoría de edad, después de empoderarse como una empresa eficaz y de gran solidez.

Cuando se cumplen treinta años, se ha entrado a la adultez, se han decantado los arrebatos de la adolescencia y si aún queda algo de la infancia y de los inseguros primeros pasos, esto ha sido superado desde la persistencia en el trabajo y la conquista de nuevos y mejores espacios. Queda solamente sumar a los protocolos, el conteo de los mensajes, la lectura de las tarjetas, el descanso de abrazos y apretones de manos, los saludos y la recapitulación de los discursos, para sentarse a evaluar todo el proceso de vida, y preguntarse en medio del desconcierto:
                         ¿Y cuándo ocurrió todo esto?
 Como en toda actividad humana, siempre habrá cosas para mejorar; esa es la tarea que comienza mañana.

Durante cerca de veinte años hemos participado en una de las actividades más gratificantes en El Diario del Otún: el Programa Prensa Escuela. Un acercamiento a la comunidad educativa, una manera de presentar la historia de la región con el uso del periódico y una forma de mirar el texto escrito a diario, como apoyo a la capacidad lectora y crítica de estudiantes y docentes.

Al recoger el fruto del trabajo de tres décadas, en una actividad difícil en nuestro medio, vaya el saludo de felicitación a la “Gran Familia El Diario del Otún”, a sus Directores, Jefes de Sección, Periodistas, Secretarias, Personal de apoyo y todos aquellos que hacen lo posible para que el periódico cobre vida en manos de los buscadores de la historia de su tiempo, los lectores de cada día.

Pereira 12 de Junio de 2012.
-NLA- 

martes, 5 de junio de 2012


UNA BOTELLA AL MAR

A Diana Marcela   y  Christian Andrés…

En las noches tranquilas, cuando la luna alumbra los caminos del mar;  y en los días tibios de soles apacibles, los viajeros rendidos por la monotonía del agua y el cielo, los pescadores y los hijos de los pescadores ensimismados en las largas vigilias de la pesca y los enamorados que buscan la soledad de las playas; arrojan  botellas al mar con mensajes de saludo, vida y esperanza.

Esta es una antigua costumbre de los vecinos del mar  y de los viajeros sin rumbo; y en algunos casos de los estudiantes de los colegios ribereños que una vez al año hacen su listado de sueños e irrealidades, para que el oleaje acompañado por el viento, transporte ese mensaje contenido en la diminuta barca de cristal que navega dirigiendo su propio destino, para que el mar haga  su tarea y deposite los mensajes sobre la playa donde posiblemente alguien espera, en medio de su lejana soledad, que se le diga si es posible la felicidad y que desde cualquier lugar del mundo se le recuerda en el deseo de acompañarlo en los atardeceres de su vida y sus nostalgias.

El mar es un mundo inmenso, confiable y desaplicado. Dueño de corrientes, senderos de espuma que trazan en secreto los caminos a los marineros. El mar vive en los placeres de sus vientos, sus mareas y de la vida que se recrea en cada rinconcito del agua.

Cuando ella y él, entendieron que el mar era el mensajero eterno y que asumiría su encargo con precisión de relojero, aceptaron comprometerlo en llevar su mensaje.

Sin esperar respuesta, se dieron a la tarea de escribir palabras de amor y esperanza, pensar en propósitos y lealtades en la intención de hacer de la vida una tarea de realizaciones constantes y del amor el aliento permanente para vivir.

Allí se contaba también,  que se podía hacer del sueño una realidad y que más allá de los días y los años se extendía la permanencia sobre el tiempo en las posibilidades de encuentro con el futuro.

Una botella arrojada al mar, llegó una vez a nuestra playa. El mensaje era escueto: “Seremos uno”. No fue posible alcanzar con las manos la orilla opuesta… estaba distante.  Fue mayor la fatiga y el desconsuelo, pero nos alentaron las palabras, las flores y los aromas que acompañaban aquel mensaje en esa botella que llegó sobre la espuma de las olas aquel día de Junio.

La placidez del momento dio a entender que en el universo todo era felicidad. Los hijos habían descubierto la clave de su futuro. No pudimos detener esa lágrima que rodaba por la mejilla marcando los límites de la  ausencia. Ellos entendieron que estaríamos muy cerca, pero también un poco más allá del tiempo y de las ausencias y que les correspondía hacer camino desde el punto en el cual fue plena nuestra compañía.


Este debía empezar; el universo lo había decidido todo, sin darle tregua al dolor. El futuro era su posesión inmediata y la meta de su felicidad estaba en el camino que restaba por construir.

En el momento de los silencios, pensaron que algún día sus hijos y los hijos de sus hijos, rescatarían esa botella enviada sobre el mar de los sueños a una playa distante en el tiempo. Alguien quiso recordárnoslo con sus versos:

“Pongo estos seis versos en mi botella al mar 
con el secreto designio de que algún día 
 llegue a una playa casi desierta
 y un niño la encuentre y la destape 
y en lugar de versos  extraiga piedritas 
y socorros y alertas y caracoles”…
-NLA-